Beneficios de Digitalizar la Gestión Fitosanitaria
La agricultura es una de las industrias con menor adopción de tecnologías digitales.
Para lograr el éxito en la transformación digital de cualquier organización o industria, es fundamental tener claridad sobre el valor y beneficios que esta genera. La agricultura es una de las industrias con menor adopción de tecnologías digitales. No es fácil demostrar las bondades de las nuevas tecnologías en un sector tradicional donde los resultados de una buena gestión agrícola dependen de muchas variables, muchas fuera del control humano como el clima.
Sin embargo, en los últimos años soluciones digitales innovadoras han replanteado la manera como se administran los campos de cultivos. Múltiples tecnologías como el uso de sensores, drones, software e Inteligencia Artificial han llegado a la agricultura con resultados positivos contundentes que les han permitido posicionarse como herramientas cruciales para el éxito de la gestión agrícola.
Este es el caso de soluciones digitales para el manejo integrado de plagas y enfermedades que presentan beneficios indiscutibles para los productores agrícolas. Entre los principales de la digitalización de la gestión fitosanitaria se encuentran:
Mayor rendimiento de las plantas
El control y la acción oportuna en la detección de plagas y enfermedades, evita que los cultivos pierdan productividad. Atacar problemas fitosanitarios de manera rápida y focalizada es crucial. Una plaga o enfermedad que no se controla a tiempo maltrata los cultivos, reduciendo su capacidad productiva, y aumentando el riesgo que el problema se esparza de planta a planta y de lote a lote comprometiendo los resultados de toda una campaña agrícola.
Tecnologías para la detección temprana de plagas y enfermedades como satélites o drones, o software para el monitoreo de evaluaciones en campo es clave para asistir a los agricultores en la respuesta inmediata ante infestaciones que pueden comprometer seriamente el rendimiento de sus plantas. Gracias a estas tecnologías, los productores pueden llegar más rápido a las zonas de infestación y hacer aplicaciones focalizadas para evitar que los problemas se extiendan a toda su área productiva. De esta manera, se garantiza que puedan cosechar más kilos de producto final por hectárea.
Reducción de costos de plaguicidas y otros ingredientes activos
Adicionalmente a la mayor productividad por área cosechada, la detección temprana de plagas y enfermedades permite reducir los volúmenes de aplicaciones de plaguicidas y agroquímicos, ahorrando costos y logrando un impacto positivo en el medio ambiente. Al llegar antes al lugar del problema y responder de forma focalizada, la cantidad de ingredientes activos se limita. Los productores agrícolas pueden controlar la infestación a tiempo, sin grandes pérdidas o desviaciones a su plan sanitario.
Asimismo, el cumplimiento efectivo del plan sanitario reduce el riesgo de aparición de ciertas enfermedades y hongos que pueden comprometer seriamente el desempeño de los cultivos. Aplicar preventivamente es mucho más económico que aplicar reactivamente ante problemas de plagas y enfermedades que se escapen de las manos. Software agrícola que facilite el monitoreo y control de las aplicaciones fitosanitarias es un gran aliado de productores que quieran reducir costos de plaguicidas y pesticidas. Costos que para algunos cultivos representan hasta el 10% del costo total de producción.
Cumplimiento de factores de inocuidad para asegurar ventas a mercados de destino
Para poder exportar fruta a destinos internacionales o venderlas en el mercado local, es fundamental que los alimentos no contengan agroquímicos y otros microorganismos que comprometan la salud de los consumidores finales. Para ello, se deben garantizar las buenas prácticas agrícolas entre las cuales se encuentra el manejo integrado de plagas. Existen ciertos parámetros y límites de aplicación de plaguicidas y otros ingredientes activos que deben cumplirse para que los alimentos cuenten con las certificaciones necesarias y se puedan comercializar de manera segura y responsable.
Los sistemas digitales de información agrícola juegan un papel vital para una gestión óptima de fitosanidad. Este tipo de software permite a los productores agrícolas monitorear con exactitud los volúmenes y tiempo de sus aplicaciones fitosanitarias, así como los límites máximos de residuos (LMRs). El registro adecuado de las aplicaciones y el cumplimiento de estos límites son críticos para que las empresas agroexportadoras logren las certificaciones - como GLOBAGAP - que les permitan acceder a sus mercados de destino. Sin esta gestión, las empresas agrícolas pueden tener rechazos de productos o cierres de mercados que reducirían sus ingresos hasta en más del 80%.
Mayor productividad de los evaluadores en campo
Si bien muchas veces el resultado agrícola se atribuye a factores naturales o climáticos, el factor humano tiene una injerencia crucial en el desempeño de los cultivos. En algunos cultivos de alto valor como los arándanos o las uvas de mesa, el costo de los trabajadores representa más de la mitad de los costos totales de producción. Adicionalmente, el trabajo en el campo es muy sacrificado por las difíciles condiciones. Esto ha reducido la proporción de trabajadores agrícolas en las últimas décadas.
Soluciones digitales que asistan y complementen a los trabajadores son decisivas para alimentar la creciente demanda global de alimentos. Con imágenes de drones y satélites se pueden identificar problemas en el vigor de las plantas o concentraciones de humedad que evidencian la aparición de alguna plaga o enfermedad. De esta manera, los agricultores pueden llegar antes al problema sin tener que gastar valiosas horas en monitoreos aleatorios. Con el uso de aplicaciones móviles en celulares se puede compartir y comunicar esta información de manera inmediata, evitando la lenta e ineficiente digitación de datos de lápiz y papel.
Eliminar contingencias laborales evitando exposición de personas a productos químicos
Llevar un control riguroso de las aplicaciones fitosanitarias de agroquímicos y otros insumos, así como monitorear con impecable precisión los periodos de carencia y reingreso son actividades vitales para salvaguardar la salud de los trabajadores agrícolas y de los consumidores. Muchos de los insumos empleados para el manejo integrado de plagas tienen ingredientes activos que pueden comprometer la salud de las personas que trabajan en los campos de cultivos. En especial cerca al periodo de cosecha, es indispensable cumplir con los días permitidos para el reingreso del personal a hacer actividades en el campo.
El empleo de software que ayude a los agricultores a controlar con alertas y mapas los días de carencia y reingreso es vital para eliminar cualquier riesgo de contaminación de los trabajadores. Este tipo de software permite además la trazabilidad de las aplicaciones tanto en cantidades como en fechas para garantizar al consumidor final el cumplimiento de las buenas prácticas agrícolas. Cada vez más, el mercado exige esta transparencia y busca reducir el impacto negativo en los trabajadores y en el medio ambiente relacionado a la producción de alimentos.
Es evidente que los retos actuales de la agricultura exigen una mentalidad más abierta y comprensiva hacia tecnologías y soluciones digitales que ayuden a los productores agrícolas a cuidar mejor los recursos humanos y naturales involucrados en el sector. La innovación y la transformación digital deben ser componentes clave de la agenda estratégica de los agricultores, no solo de la agroindustria sino también de las asociaciones y los gobiernos que trabajen con pequeños y medianos agricultores. La futura alimentación del planeta está en juego. No podemos esperar. Debemos acelerar la digitalización del agro. La nueva agricultura es digital.