Distintas organizaciones colaboran para llevar Inteligencia Artificial a los cultivos de uva
En los últimos meses, la Asociación de Exportadores de Frutas de Chile AG (ASOEX) ha liderado un proyecto piloto con el objetivo de digitalizar el conteo de uva de mesa a través de la inteligencia artificial.
En los últimos meses, la Asociación de Exportadores de Frutas de Chile AG (ASOEX) ha liderado un proyecto piloto con el objetivo de digitalizar el conteo de uva de mesa a través de la inteligencia artificial y del uso de fotos y videos georreferenciados en la Región de Coquimbo.
La iniciativa que cuenta con la participación de la empresa exportadora Subsole, la Universidad Católica del Norte (UCN), y SpaceAG, una startup latinoamericana dedicada al desarrollo de soluciones basadas en software e inteligencia artificial que maximizan los rendimientos de los cultivos y optimizan el uso de recursos críticos como el agua, fertilizantes, pesticidas y las labores en campo.
Cristian Sotomayor, gerente del programa, destaca que esta iniciativa tiene muy buenas perspectivas y posibilidades de ser replicada en otras regiones del país y con distintos tipos de fruta de exportación.
“La tecnología es el camino a seguir para impactar positivamente en la cadena completa de valor del sector agrícola, y en especial de la fruta, que está pasando por un escenario complejo, con márgenes muy estrechos” - Cristian Sotomayor, gerente del programa -
Optimizando la mano de obra
En un principio, el proyecto implica la calibración del sistema por medio de imágenes tomadas en los diferentes estadíos de crecimiento del cultivo. Los pasos posteriores avanzan mucho más rápido y de manera más certera que una evaluación manual, impactando positivamente en el presupuesto ya que reduce los márgenes de error y a su vez optimiza la mano de obra. Además, se permite recolectar grandes cantidades de información en poco tiempo logrando mejorar la precisión de las predicciones de cosecha.
La experiencia previa de esta tecnología con arándanos ha sido exitosa.
Según la información procesada por SpaceAG a partir de trabajos realizados en terreno con clientes líderes de la agroindustria regional, las pérdidas al no usar este sistema podrían variar desde los US$ 600 a los US$ 10,000 por hectárea, dependiendo de diversos factores. Se ha comprobado que gracias a la digitalización del proceso de conteo, los márgenes de contribución en el cultivo de los arándanos pueden variar desde 1,3% a 14% por hectárea. Para las uvas, se esperan resultados similares.
Distintas alternativas para aumentar la productividad
El alza del dólar y de los costos de los insumos internacionales, junto con una menor disponibilidad de trabajadores, ha estrechado los márgenes en la agricultura, rubro que, además, se ha visto enfrentado al cambio climático y la sequía que está afectando al país hace ya más de 10 años. Este complejo escenario está forzando a las empresas agrícolas a buscar distintas alternativas para aumentar su eficiencia y productividad, siendo la incorporación de tecnología una de las medidas más efectivas.